El Ayuntamiento de Gandia va a poner en marcha un ambicioso plan estratégico con el que busca, por una parte, conseguir un ahorro energético y, por otra, reducir las emisiones de CO2. Se destinará una partida de 750.000 euros, una inversión que, según el estudio, se podrá recuperar en un plazo de solo seis años, ya que los excedentes de producción eléctrica que no se utilicen para el consumo de los edificios públicos de Gandia se inyectarán a la red y se venderá para consumo por parte de externos.Con este proyecto, el ayuntamiento prevé conseguir un ahorro de 147.460 euros al año en la factura eléctrica, además de una importante reducción de las emisiones de CO2 de 170 toneladas anuales, 3.237 durante el período de vida de las placas.Los espacios en los que se instalarán las placas y, por tanto, se convertirán en productores de energía, son los colegios Botànic Cavanilles, Roís de Corella y el Enric Valor, la central de la Policia local; Poliesportiu y los centros sociales del Raval y Corea en la ciudad, además del CEIP Joan XXIII y la «escoleta» infantil municipal de Les Alqueries en el distrito del Grau. Desde estos se abastecerá, además, a espacios como los colegios de infantil y primaria Joan Martorell, Sant Francesc de Borja, Cervantes, Mondúver, las «escoletas» de Santa Anna y Corea, la de la escuela e música, el MAGa, el Centre Cívic Roís de Corella, la piscina de Beniopa, el polideportivo del Raval, el Centre Internacional de la Universitat de València, aparcamientos del Centre Històric y del Prado, el Mercat municipal, Urbalab; Ayuntamiento, Biblioteca Central, Teatre Serrano, Casa de la Marquesa, piscina del Grau, Cdt/Aula Natura, «escoleta» infantil del Grau y las oficinas municipales del distrito marítimo.
Gandia abastecerá con energía solar 37 edificios públicos
