El Gobierno de Palma de Gandia ha convocado una manifestación este domingo para que la Diputación y a la Generalitat establezcan una hoja de ruta clara para financiar el proyecto de construcción de la canalización que permita volver a tener en el grifo agua potable. Las obras costarían un millón de euros, por lo que el ayuntamiento no puede hacer frente sólo con recursos propios. El proyecto está redactado y listo por parte del ayuntamiento. El periodo de ejecución serían unos seis meses.
La Diputación pide al ayuntamiento que utilice la cantidad asignada en el Pla Obert d’Inversions para los próximos cuatro años, que son algo más de 1 millón, pero el ayuntamiento rechaza esta opción al considerar que el problema del agua es una cuestión básica y perentoria, que se debería financiar con una subvención nominativa, y no estaría en igualdad de condiciones con el resto de municipios.
Desde el pasado 11 de octubre el agua de Palma de Gandia no es potable por alto nivel de nitratos, cosa que obliga al reparto de agua en garrafas para beber y cocinar. La de la red pública. La alcaldesa, Paula Femenia, de Compromís, ha decidido convocar una manifestación para este domingo, a las 12 horas, exigiendo “una financiación justa y necesaria”.
“El pueblo de Palma se encuentra en situación de emergencia declarada. En varias ocasiones se ha comunicado esta situación a la Generalitat y la Diputación, pero no tenemos ninguna respuesta al respecto, no podemos esperar más”, señala el ayuntamiento en un comunicado.
Por otra parte, también se ha convocado una reunión informativa para los vecinos este viernes 12 de enero a las 19.30 horas en el auditorio de la Casa de la Cultura, con el objetivo de explicar la situación del agua potable en la localidad, y resolver dudas.