El Ayuntamiento de Gandia ha comenzado los trámites para la declaración de ruina de un edificio situado frente al Palau Ducal, que durante años albergó el comercio Calzados Francés. El inmueble, que ya mostraba signos de deterioro, sufrió importantes desprendimientos de su fachada tras las intensas lluvias de la pasada semana. Afortunadamente, los escombros no cayeron a la vía pública gracias a la malla de protección que se instaló tras el derribo, hace un par de años, de un edificio anexo que también se encontraba en ruinas.
Según fuentes municipales, los desprendimientos ponen en riesgo la estabilidad de la cubierta del edificio, lo que podría desencadenar un colapso en cadena hasta alcanzar el suelo. Ante esta situación, la Policía Local acordonó la zona y prohibió el paso de los viandantes mientras se realizaban las labores de saneamiento y evaluación técnica.
El equipo de técnicos municipales ha procedido a inspeccionar el edificio y, tras verificar su deterioro, el Ayuntamiento ha decidido iniciar la redacción de un expediente para declarar el inmueble en ruina, tal como ya se hizo con el edificio colindante que daba a la calle Alexandre VI. Esta medida obligará al propietario a realizar las intervenciones necesarias o, en su caso, derribar la estructura para evitar mayores riesgos.
Este nuevo incidente resalta la necesidad urgente de intervenir en estos inmuebles, que llevan décadas en un avanzado estado de deterioro. La preocupación por la seguridad de los viandantes y la conservación del patrimonio local ha llevado al Ayuntamiento a actuar con celeridad para prevenir un posible accidente.
