El alcalde de Gandia, José Manuel Prieto, ha presentado el inicio del curso político con la elaboración de los presupuestos de 2026, que según afirma, serán “los más ambiciosos de la historia” de la ciudad. Los nuevos cuentas, que se remitirán al Ministerio de Hacienda en septiembre, contemplan más de 20 millones de euros en inversiones.
Entre las partidas destacadas, figuran 7,2 millones para avanzar en el sector de Sanxo Llop —unas obras que, a día de hoy, siguen en un 39% de ejecución— y 4,4 millones para iniciar la primera fase del pabellón Gandia Arena, un proyecto largamente anunciado pero todavía sin resultados palpables.
Prieto ha subrayado que en los próximos dos años “se materializarán proyectos e inversiones históricas”, aunque muchas de las actuaciones citadas llevan años acumulando retrasos. Es el caso del Centro para Personas con Diversidad Funcional, la rehabilitación del Mercado del Prado o la nueva Marina de Gandia, entre otros.
En materia económica, el alcalde ha hecho hincapié en la reducción del paro y en la recuperación de las cuentas municipales. Ha señalado que Gandia supera por primera vez en 17 años las 25.000 personas afiliadas a la Seguridad Social, y que se han rebajado 19 millones de deuda municipal desde el inicio de su mandato. Sin embargo, la oposición ha recordado en numerosas ocasiones que estas cifras no se traducen en mejoras suficientes para el día a día de los gandienses, ya que la ciudad sigue enfrentándose a graves problemas de vivienda, precariedad laboral y falta de infraestructuras clave.
Prieto también ha defendido la necesidad de impulsar los Pactos de Ciudad y ha insistido en su voluntad de alcanzar consensos con los distintos grupos municipales. No obstante, a día de hoy, no se ha concretado ningún acuerdo real pese a que la iniciativa lleva meses sobre la mesa.
El gobierno local celebra este viernes su II Jornada de Trabajo de la legislatura para coordinar estrategia y prioridades. Mientras tanto, parte de la ciudadanía y de la oposición se preguntan si los grandes anuncios se transformarán en hechos, o si seguirán siendo, como en ocasiones anteriores, promesas pendientes de cumplir.