Los propietarios del edificio situado en la calle Cervantes, 25 aseguran que el Ayuntamiento de Ador, titular de los bajos del inmueble donde se ubican el centro de salud y el gimnasio municipal, no ha abonado todavía la parte que le corresponde de una reforma general considerada urgente por motivos de seguridad.
Según explican los vecinos, la actuación de rehabilitación fue acordada para garantizar la seguridad tanto de los residentes como de los usuarios de los servicios públicos ubicados en el bajo del edificio. La comunidad afirma que los propietarios particulares ya han efectuado el pago correspondiente, mientras que el consistorio no habría abonado todavía su parte, pese a que, indican, la partida presupuestaria está aprobada.
Los denunciantes aseguran que el Ayuntamiento se comprometió a efectuar el pago en agosto. “Estamos en octubre y, entre mentiras y engaños, todavía no hemos recibido nada”, lamentan. Afirman además que, pese a tener constancia de la disponibilidad presupuestaria, el consistorio se estaría negando ahora a cumplir con el pago comprometido.
Los vecinos han hecho un llamamiento público para lograr difusión del caso y reclamar lo que consideran un acto de justicia: “Solo pedimos que nos escuchen y que paguen su parte. Que se sepa el ayuntamiento que tenemos”.
